Seminario Francisco Mejía Lira

La pandemia de COVID-19 ha evidenciado la necesidad urgente de contar con tecnologías de diagnóstico rápidas y portátiles, pero al mismo tiempo muy precisas y fiables, que permitan un análisis masivo de la población en una situación de emergencia sanitaria. El diagnóstico en la era postpandemia (rápido, preciso, mínimamente invasivo y portátil) se configura como un área clave en la medicina del futuro.

Los biosensores fotónicos son una de las mejores alternativas para abordar este objetivo. Las principales ventajas de esta tecnología incluyen su tamaño reducido y su alta escalabilidad lo que permite una detección multiplexada y una producción en masa a bajo coste. Con este objetivo, desarrollamos plataformas de biosensores nanofotónicos basados en la técnica de la onda evanescente, capaces de proporcionar análisis de alta sensibilidad, fiables y muy selectivos, al tiempo que se reducen los tiempos de respuesta, disminuyen y/o eliminan el transporte de muestras y se utilizan volúmenes ínfimos de la muestra del paciente.

Nuestros biosensores nanofotónicos de última generación basados en tecnologías de nanoplasmónica y fotónica de silicio ya han demostrado sus excelentes capacidades de análisis mostrando límites de detección de biomarcadores clínicos a nivel fM, directamente en fluidos corporales, en pocos minutos y en entornos descentralizados. Hemos demostrado la utilidad de esta tecnología nanofotónica para la identificación de bacterias patógenas, la monitorización de fármacos anticoagulantes, el diagnóstico

de alergias, el diagnóstico precoz de cáncer o el diagnóstico eficiente del coronavirus SARS-CoV-2, entre otros muchos ejemplos.